Las finanzas éticas
Las Finanzas Éticas intentan dar y construir diferentes respuestas para todas aquellas personas ahorradoras que quieren responsabilizarse de lo que su entidad financiera hace con su dinero
Las Finanzas Éticas deben su origen a los movimientos sociales de los años sesenta y setenta cuando activistas a favor de la paz y el medio ambiente encontraban contradicciones entre sus propuestas y el uso que hacían las entidades financieras de los recursos que depositaban.
Así pues, entidades pacifistas se dan cuenta de que las financieras con las que trabajan son accionistas de buena parte de las principales empresas de la industria armamentista, o entidades ecologistas comienzan a ver cómo quien financia los proyectos que generan daños irreparables en nuestro medio ambiente son las propias entidades que gestionan sus recursos”.
De alguna forma, la propuesta de las Finanzas Éticas parte de la contradicción detectada y ofrece las alternativas a la preocupación de los diferentes colectivos más sensibilizados en temas como la Paz, los Derechos Humanos, el Desarrollo Humano y Sostenible, la Solidaridad y la Justicia Global.
Se han propuesto cinco principios de operación que un banco ético debe cumplir y que permite a una persona confiar en que su dinero será destinado a proyectos que se ajusten a una propuesta transformadora más allá del modelo comercial de banca.
El trabajo propuesto con el alumnado a lo largo de esta guía gira en torno a esta idea, y de promover la coherencia entre nuestras decisiones y nuestras creencias. Confiamos en que este camino representará una oportunidad de aprendizaje no sólo por el tema a tratar sino por los recursos (cognitivos y actitudinales) a movilizar en este proceso.